Después de teneros un montón de días abandonados, y no tengo disculpa porque no estoy de vacaciones. Vuelvo a la carga, esta vez con una de esas recetas de toda la vida.
Esta vez me la ha pasado mi madre, y es una receta de mi tía Claudia, desde aquí se la voy a dedicar.
INGREDIENTES:
100 gr de mantequilla
100 gr de margarina
2 yemas
5 cucharadas de azúcar
5 cucharadas de nuez molida
Harina tamizada (la necesaria para hacer una masa)
1 clara de huevo
Almendras enteras sin tostar
PREPARACIÓN:
Lo primero que tenemos que tener presente es dejar tanto la mantequilla como la margarina a temperatura ambiente para conseguir el punto pomada, comenzamos a batir con una varilla e incorporamos las yemas de huevo, seguimos removiendo y agregamos el azúcar, la nuez y la harina.
En este momento tendremos que sacar la varilla y comenzar a emplear las manos, hacemos una bola con la masa y la dejamos reposar en sitio fresco durante al menos media hora.
Precalentamos el horno a 140ºC y estiramos la masa con ayuda de un rodillo hasta conseguir un espesor aproximado de 1cm, la cortamos en formas con ayuda de un cortapastas, en mi caso varios, y decoramos con una almendra cruda. A continuación las pintamos con clara batida y las colocamos sobre papel de horno en una bandeja.
No crecen en el horno pero conviene ponerlas separadas porque la mantequilla tiende a desparramar un poco las masas.
Horneamos durante 13 minutos vigilando no sea que se doren demasiado, en cuyo caso hay que ponerle papel de aluminio por encima.
Dejamos enfriar sobre una rejilla y las tenemos listas.
Esta vez me la ha pasado mi madre, y es una receta de mi tía Claudia, desde aquí se la voy a dedicar.

100 gr de mantequilla
100 gr de margarina
2 yemas
5 cucharadas de azúcar
5 cucharadas de nuez molida
Harina tamizada (la necesaria para hacer una masa)
1 clara de huevo
Almendras enteras sin tostar
PREPARACIÓN:
Lo primero que tenemos que tener presente es dejar tanto la mantequilla como la margarina a temperatura ambiente para conseguir el punto pomada, comenzamos a batir con una varilla e incorporamos las yemas de huevo, seguimos removiendo y agregamos el azúcar, la nuez y la harina.
En este momento tendremos que sacar la varilla y comenzar a emplear las manos, hacemos una bola con la masa y la dejamos reposar en sitio fresco durante al menos media hora.
Precalentamos el horno a 140ºC y estiramos la masa con ayuda de un rodillo hasta conseguir un espesor aproximado de 1cm, la cortamos en formas con ayuda de un cortapastas, en mi caso varios, y decoramos con una almendra cruda. A continuación las pintamos con clara batida y las colocamos sobre papel de horno en una bandeja.
No crecen en el horno pero conviene ponerlas separadas porque la mantequilla tiende a desparramar un poco las masas.
Horneamos durante 13 minutos vigilando no sea que se doren demasiado, en cuyo caso hay que ponerle papel de aluminio por encima.
Dejamos enfriar sobre una rejilla y las tenemos listas.
En una lata hermética os pueden aguantar en perfecto estado hasta 15 días.
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Pastas de té |
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